La descongelación periódica del congelador es una operación importante para mantener la eficiencia del aparato y ahorrar en la factura eléctrica. La capa de hielo que se forma en el interior puede tener diversas consecuencias en el rendimiento, la duración y sobre todo en el consumo del aparato. Descubre por qué descongelar el congelador ahorra energía y cómo hacerlo rápidamente sin tener que desenchufarlo.
Escarcha en el congelador
¿Por qué es necesario descongelar el congelador periódicamente?
La descongelación periódica del congelador es una operación importante para mantener la eficiencia del aparato y evitar consumir mucha energía. Esta operación, si se realiza correctamente, permitiría ahorrar un 30% de su consumo por cada medio centímetro de escarcha eliminada. Aquí están las razones.

Reducir el consumo de energía
La capa de hielo que se forma en el interior del congelador tiene varios centímetros de espesor y puede reducir la eficiencia del motor, haciéndolo trabajar más y por tanto consumir más energía. Esto sucede porque la capa de hielo actúa como una barrera al flujo de calor desde el ambiente externo hacia el motor, haciendo que aumente la velocidad para mantener la temperatura deseada dentro del congelador. Además, aumenta la resistencia térmica de las paredes del congelador, lo que dificulta la transferencia de calor desde el ambiente exterior al interior del aparato. Por lo tanto, eliminar el exceso de hielo permite que el motor funcione de manera más eficiente y consuma menos electricidad.

Evite el sobrecalentamiento
Al impedir un correcto intercambio de calor con el ambiente exterior, la capa de hielo en el interior del congelador puede provocar un sobrecalentamiento del motor. Cuando el motor se sobrecalienta, su eficiencia disminuye y aumenta el consumo de energía. Además, el sobrecalentamiento puede dañar el motor y acortar la vida útil del dispositivo. Por lo tanto, al descongelar el congelador evitas que el motor se sobrecaliente y proteges el aparato de los daños que puede provocar el exceso de calor.

Mejorar la eficiencia del almacenamiento
La capa de hielo dentro del congelador puede dificultar la circulación del aire frío, reduciendo su capacidad para contener alimentos. Cuando el aire frío no circula adecuadamente, algunas áreas del congelador pueden calentarse más que otras, creando las condiciones ideales para que crezcan bacterias y los alimentos se echen a perder. Quitar el hielo acumulado garantiza una mejor circulación del aire frío y por tanto una mejor conservación de los alimentos, evitando así el desperdicio.

¿Con qué frecuencia debes descongelar el congelador?
El momento ideal para descongelar el congelador depende de la capa de hielo que se haya formado en el interior del aparato. Generalmente es recomendable realizar esta operación cuando la capa de hielo ha alcanzado un espesor de unos 3-4 milímetros, porque en esta etapa su consumo energético puede aumentar hasta un 30%. Si el aparato se utiliza con frecuencia y la capa de hielo se forma rápidamente, será necesario descongelarlo con más frecuencia. Por el contrario, si se utiliza con menos frecuencia, la capa de hielo se formará más lentamente y es posible que se reduzca la frecuencia de descongelación.

Descongelar un congelador
¿Cómo descongelar rápidamente el congelador sin desenchufarlo?
Evidentemente desenchufarlo es la forma más sencilla de descongelar un congelador , pero ¿cómo se hace incluso estando enchufado? Al desenchufar el electrodoméstico corres el riesgo de comprometer la conservación tanto de los alimentos en el congelador como de los almacenados en el frigorífico. A continuación te indicamos los pasos a seguir para descongelarlo incluso estando conectado:

Retire todos los alimentos del congelador y guárdelos en un lugar fresco.
Coloca una cacerola con agua hirviendo en su interior para subir la temperatura y recoger el agua que se formará durante la descongelación.
Cierra el congelador y espera a que se derrita el hielo. De esta forma, el calor del agua hirviendo ayudará a derretir el hielo más rápido.
Abra el congelador de vez en cuando para dejar entrar aire caliente, lo que también ayudará a derretir el hielo más rápido.
Utilice un paño húmedo, una toalla o un objeto puntiagudo para eliminar el hielo restante. Evite el uso de objetos punzantes o afilados, ya que pueden dañar el acabado del congelador y lesionarlo.
Seque bien el congelador.
Cierra el congelador y espera a que la temperatura en el interior del aparato vuelva a los valores normales antes de volver a colocar los alimentos en su lugar.