Conserva fruta fresca durante mucho tiempo sin frigorífico, ¡descubre cómo!

Conservar fruta fresca sin frigorífico: una solución que durará un año
En unos sencillos pasos, se revela una realidad sorprendente: conservar fruta durante un año entero sin depender de un refrigerador. Este increíble método consiste en sellar y almacenar varias frutas en grandes cantidades dentro de frascos de vidrio. ¿La mejor parte? No hay necesidad de refrigeración.

Sin embargo, mantener la frescura de la fruta requiere un entorno específico. Una vez cuidadosamente dispuestos en frascos, es imperativo conservarlos en un lugar seco a una temperatura que no supere los 18 grados. Además, una vez abierto el frasco, se recomienda consumir la fruta en conserva a los pocos días.

Pasos para conservar frutas en frascos de vidrio:

Selecciona el Frasco Adecuado: Adquiere un frasco de vidrio con capacidad de un litro y medio.
Prepare agua hirviendo: hierva una olla con agua en la estufa.
Prepare la fruta: retire los tallos y las hojas de la fruta. Lave y enjuague bien la fruta (al menos 3 o 4 veces), seguido de un secado adecuado.
Llenado de frascos: Coloque la fruta preparada en frascos de vidrio y vierta el agua caliente en cada frasco. Después de llenar los frascos hasta el borde, déjalos reposar durante 10 minutos, asegurándote de colocar las tapas sin cerrarlas.
Escurrir y hervir: Vierta el agua de los frascos en una cacerola y vuelva a hervir.
Endulzar la fruta: Agrega dos cucharadas de azúcar a la fruta. Vierta el agua hervida nuevamente en los frascos.
Cierre Hermético: Cierra bien los frascos de vidrio, dejando un poco de espacio en el borde de cada frasco.
Aislamiento y enfriamiento: Envuelva los frascos de vidrio en dos toallas y déjelos a un lado. Déjalos enfriar a temperatura ambiente durante 24 horas.
Siguiendo estos sencillos pasos, la fruta en conserva se puede almacenar impecablemente hasta por 12 meses. Este método innovador proporciona una solución práctica y eficiente para mantener las frutas frescas sin necesidad de refrigeración, permitiéndole disfrutar de la dulzura de la naturaleza durante todo el año.