sabes injertar rosas, podrás conseguir dos colores de flores diferentes en un mismo arbusto. Las rosas se encuentran entre las plantas más fáciles de injertar y la mayoría de los arbustos son producto del injerto de un color o tipo específico de rosa en uno más fuerte y saludable. Mediante injertos también se puede adquirir el color de los pétalos de una planta enferma utilizando una sana como portainjerto. El tallo de la rosa que deseas injertar en un color diferente se llama vástago.

Mejor época del año para injertar
Lo primero que hay que tener en cuenta a la hora de decidir injertar una rosa o experimentar con ella en casa es la época del año. Se recomienda hacer esto principalmente en verano, cuando la savia corre vigorosamente por toda la planta. También puedes hacerlo si observas que crecen rápidamente y aparecen frescas y radiantes. Ahora bien, presta mucha atención y comenzaremos el injerto paso a paso.

Paso 1
Limpia el cuchillo que vas a utilizar para cortar los vástagos con alcohol limpiador. Esto ayudará a prevenir la propagación de enfermedades durante el trasplante.

Paso 2
Corta algunos tallos del rosal que deseas combinar con otros. A esto se le llama recolectar esquejes. Corta una sección del tallo que contenga tres yemas. Recorta el trozo de la parte superior del cogollo inferior y mide dos cogollos, donde deberás hacer otro corte encima del tercero.

Paso 3
Con una navaja, talle una forma de “V” en el extremo inferior del vástago.

Paso 4
Elige uno de los tallos leñosos de la planta de rosa que quieras utilizar como base. Esta debería ser una variedad de planta bienal. Usar nuevos crecimientos no funcionará. Recorta la parte superior del tallo y haz un corte de un centímetro de profundidad en el medio del tallo.

Paso 5
Inserta el vástago en el corte que hiciste en el tronco del portainjerto. Envuelva bien el injerto con cinta adhesiva. El injerto debería tardar entre cuatro y seis semanas en asentarse. Repita estos pasos para agregar más injertos a la planta portainjerto. Los nuevos colores de rosas crecerán sólo en los tallos injertados.

Cuidados post-trasplante

Riegue abundante y frecuentemente las plantas injertadas, con el objetivo de mantener el suelo constantemente húmedo durante los primeros 15 días.
Se recomienda recortar los primeros brotes del tallo hasta que la planta se estabilice, sobre los 2 o 4 primeros brotes, para ayudar a la consolidación del injerto.
Retire la cinta por sí sola cuando el injerto comience a crecer.
Se debe tener cuidado de asegurar que se les aporte un sustrato de humo y abono.
Las rosas generalmente necesitan espacio, aire y luz solar para prosperar.
Ahora que estás informado, no hay excusa para no injertar y obtener rosas de hermosos colores.