Embarcarse en el viaje del cultivo de caquis a partir de semillas puede ser emocionante y gratificante. Esta guía completa lo guiará en cada paso, asegurando que su aventura de cultivar estas deliciosas frutas sea exitosa.
Elegir la variedad de caqui adecuada
variedad de caqui
Para el cultivo en macetas, las variedades enanas o semienanas como Fuyu o Jiro son ideales. Se adaptan bien a entornos de contenedores y se autopolinizan, lo que los hace convenientes para espacios pequeños.
Preparando la olla ideal
Seleccione una maceta espaciosa, de al menos 22 a 24 pulgadas de profundidad y ancho, para acomodar las largas raíces pivotantes del árbol de caqui. Un buen drenaje es fundamental para evitar la pudrición de las raíces, siendo adecuados materiales como la cerámica, el plástico o la madera.
Composición del suelo
Cree una mezcla de tierra con buen drenaje utilizando tierra para macetas, abono orgánico y perlita o arena. Esta mezcla garantiza que su árbol de caqui tenga el mejor ambiente para el crecimiento y la salud de las raíces.
Proceso de germinación de semillas
semillas de caqui
Selección y preparación de semillas: comience con caquis completamente maduros. Extrae las semillas y límpialas bien.
Método de toalla de papel húmeda: Remoje las semillas en agua tibia durante 24 horas. Después de remojarlas, coloca las semillas sobre una toalla de papel húmeda y dóblala para cubrirlas.
Sellado en un recipiente: Coloque la toalla de papel húmeda con las semillas en una bolsa con cierre o en un recipiente hermético. Esto crea un ambiente húmedo ideal para la germinación.
Estratificación: Conservar el envase en el frigorífico durante unos 3 meses. Esta estratificación en frío imita el proceso natural de invernada que sufren las semillas en la naturaleza.
Plantación: Después de la estratificación, plante las semillas en un recipiente alto con tierra para macetas esterilizada, aproximadamente a 2 pulgadas de profundidad. Mantenga el recipiente en un lugar cálido y luminoso.
Atención continua
Riegue la planta profundamente, permitiendo que la tierra se seque ligeramente entre riegos. Fertilice en la temporada de crecimiento y pode para mantener la forma y la salud. Asegúrese de que el árbol reciba de 6 a 8 horas de luz solar directa al día.
Consejos especiales para el éxito
Trasplante: trasplante su árbol de caqui cada 2 o 3 años para refrescar el suelo y dejar más espacio para el crecimiento de las raíces.
Polinización cruzada: Para mejorar la producción de frutas, considere la polinización cruzada plantando múltiples variedades.
Cuidado en invierno: Para árboles en climas más fríos, traslade las macetas a un espacio interior sin calefacción durante el invierno.
una caja con caqui
Si sigue estas pautas y brinda un cuidado constante, podrá cultivar árboles de caqui saludables a partir de semillas y disfrutar de sus deliciosos frutos. La paciencia y la atención son claves, ya que los caquis pueden tardar algunos años en empezar a dar frutos.